jueves, 24 de septiembre de 2009

Honduras: hoy

"¡Aquí nadie se rinde, el pueblo unido jamás será vencido!"

Por María Belén Demartin
Hace pocos días Honduras no pudo festejar la conmemoración de la independencia. A pesar de que el artículo cuatro de la Constitución de la República de Honduras establece que la forma de gobierno es democrática, republicana, y representativa; y que el quinto, declara que el gobierno debe sustentarse en el principio de la democracia participativa, del cual se deriva la integración nacional, que implica participación de todos los sectores políticos a fin de asegurar y fortalecer el progreso de Honduras basado en la estabilidad política y en la conciliación nacional. Éstas son hoy por hoy palabras plasmadas en un papel.

El 28 de junio de 2009, a primeras horas de la mañana, el presidente Zelaya fue detenido en su domicilio por militares a las órdenes del Jefe del Estado Mayor y trasladado a Costa Rica. Por la tarde del mismo día oscuro, en el Congreso se leyó una carta de renuncia de Manuel Zelaya, que fue desmentida por el propio Zelaya. El Congreso aceptó la supuesta renuncia y designó a Roberto Micheletti, (presidente del Congreso) como sucesor. En síntesis: otro Golpe de Estado se suma a la larga lista de sufrimiento en América Latina.
Hay personas que sostienen que no existen las casualidades, sino las causalidades, un claro ejemplo: el mismo día en que el presidente Zelaya fue derrocado, se iba a realizar un sondeo de opinión nacional para preguntar a la población si quería que se realice un referéndum en las próximas elecciones, para saber si debía o no, formularse una nueva Constitución. El efecto: un golpe de Estado.
¿Qué hizo Zelaya para que un Golpe de Estado lo destituya de su puesto? La respuesta: imposible de contestarla, ya que nadie merece sufrir semejante atropello. El 7 de diciembre del 2005, Manuel Zelaya ganó las elecciones con el 49,9% de los votos. Sus objetivos: mejorar la calidad de todos los ciudadanos hondureños.
Los hechos: Honduras poseía hasta 2007 el peor sistema educativo de América Central, con 1.300.000 analfabetos. El gobierno de Zelaya implementó el método cubano de enseñanza “Yo, sí puedo”; a su vez se puede decir que la miseria, el analfabetismo, y la insalubridad, en la actualidad va disminuyendo, gracias al trabajo con la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA), organismo que incorporó a Honduras por intermedio de Zelaya.

El ALBA es una propuesta de integración, que pone el énfasis en la lucha contra la pobreza y la exclusión social de los pueblos latinoamericanos. Se fundamenta en la creación de mecanismos para introducir ventajas cooperativas entre las naciones, permitiendo compensar las desigualdades existentes entre los países del hemisferio.
Uno de los objetivos del ALBA es la integración latinoamericana, a partir del conocimiento de posiciones e intereses comunes que permitan constituir alianzas estratégicas y presentar posiciones comunes en el proceso de negociación.
ALBA es una propuesta para construir consensos e integración, en función de alcanzar un desarrollo nacional y regional que elimine la pobreza, las desigualdades sociales y asegure una creciente calidad de vida para los pueblos.
El ALBA, es una manifestación de que Otra América es Posible.
La oposición indudablemente quiere romper la unidad centroamericana que está logrando el ALBA.

Honduras está unida contra el régimen usurpador que asaltó las instituciones del Estado el 28 de junio. La ciudadanía reclama el retorno de Zelaya, la celebración de elecciones libres y democráticas y la elaboración de una nueva Constitución más justa, equitativa, y participativa, para todos los hondureños.
El futuro de Honduras, como de todos los pueblos, está en manos del pueblo.

Los gobiernos latinoamericanos reclaman una pronta solución para restablecer el Estado de Derecho y restitución de Zelaya.
El lunes 21 de septiembre, finalmente, Manuel Zelaya pudo después de dos intentos fallidos, pisar suelo hondureño y se refugió en la Embajada de Brasil; desde allí ha invitado al diálogo. Pero el problema es que desde el régimen de facto no ha habido una recepción franca. Lo que hay son disparos y represión.
La “solución” (supuestamente) para la restitución de Zelaya, es firmar el Acuerdo de San José con el apoyo de Naciones Unidas y la OEA. Producto de la mediación del presidente costarricense Oscar Arias, que plantea un gobierno de unidad nacional y la declaratoria de absolución para los responsables del 28 de junio. O sea hacer borrón y cuenta nueva. Lo cierto es que “quien no conoce su pasado está condenado a repetirlo en el futuro”.


El deterioro de la comunicación, de un diálogo sincero, es uno de los grandes flagelos de esta humanidad, y es por eso que estamos, como estamos.

La postura tomada por los aparatos eclesiásticos ante el Golpe de Estado en Honduras

El golpe hace sonar diferentes campanas

Por Marina Basgall
Todo empezó luego del anuncio de Manuel Zelaya de realizar un referéndum para instalar una asamblea constituyente en la que se permita la reelección inmediata. Esto despertó un conflicto entre los diferentes poderes del estado hondureño y produjo el Golpe de Estado del 28 de junio de este año. El presidente Zelaya fue expulsado de Honduras y Roberto Micheletti tomó su cargo.

“Si una cosa debe reconocerse, es que toda actitud que tome el hombre, tiene una dimensión espiritual, sicológica, moral y también las dimensiones políticas, sociales y económicas. No existen actitudes apolíticas, uno hace política con cualquier actitud que tome”.

Me propongo en el siguiente escrito ocuparme de las posturas de los aparatos eclesiásticos hondureños ante el Golpe de Estado en Honduras que acontece desde el último 28 de junio. Estas actitudes están plasmadas en pronunciamientos y jornadas de oración y, también, en documentos de las diócesis hondureñas y en las movilizaciones a favor y en contra de Zelaya en las que participan, sin duda, creyentes religiosos, cristianos, protestantes y católicos.
No quiero que este trabajo sea tomado como un ataque a la fe religiosa, sí me interesa introducir los caracteres de este substrato que lleva a los aparatos clericales públicos, con mayor capacidad de incidencia en la población, a apoyar la constitución y continuidad de un sistema de dominación económico, social, político y cultural centrado en intereses y privilegios particulares y excluyentes y que resuelve sus situaciones de crisis con violencia armada. Si se prefiere, en términos directos, esta discusión se pregunta por qué los golpes militares resultan apoyados por los aparatos clericales cristianos de masas y la violencia, que no es solo militar o policial, es acompañada con escasa o ninguna crítica por estos aparatos clericales.
Independientemente de que el presidente José Manuel Zelaya haya incurrido en acciones inconstitucionales, acciones por los cuales se le debió seguir un proceso de acuerdo a la las leyes hondureñas, contra él se activó un golpe de Estado.
Las posturas se ven en el “Mensaje de la Diócesis de Santa Rosa de Copán”, fechado el 1º de julio, donde se rechaza tajantemente el Golpe de Estado, éste fue suscrito por el obispo Luis Alfonso Santos y sostiene que no ha existido ningún golpe.

Mientras que la Conferencia Episcopal, apoya un golpe empresarial/militar y, con su respaldo clerical y el de otros ‘pastores’, puede ser valorado asimismo como ‘cristiano’.
Debe observarse que tanto las jornadas de oración, como la declaración de la Conferencia Episcopal hondureña fueron ampliamente difundidas por la prensa y las agencias periodísticas favorables al golpe. De esta manera, lo que sostiene a los posicionamientos y toma de partido clericales en favor de una dominación oligárquica y neoligárquica que, históricamente se puede comprobar, tiene efectos antievangélicos y antihumanos por ser excluyente y bloquear sistémicamente la institucionalidad democrática y el reconocimiento de derechos humanos tanto en su versión individual como social.
Los aparatos ministeriales ‘protestantes’ también apoyan el golpe y han saludado efusivamente a los militares en tanto ellos han sido el brazo con el que Dios ha atendido a las oraciones y se opusieron a lo que creyeron era la intención del presidente Zelaya por reformar la Constitución.
Pero uno se pone a pensar, si los golpistas reprimen y en la represión se producen muertes, entonces la pugna se torna mayor: Dios no puede desear esas muertes derivadas de la remoción de una autoridad.
No es raro que el pleno de obispos no mencione en su declaración ni una sola vez los derechos humanos, pese a la represión y censura que se estaba desplegando ante sus ojos. No es sencillo entender por qué el aparato clerical respalda los golpes de Estado y no toma ninguna acción efectiva para detenerlos y castigarlos.

En Honduras la libertad de expresión dejó de ser un derecho

La información es una víctima

Por Noelia Bruno
Tan pronto como los militares tomaron el poder en el Estado hondureño, la autonomía de los ciudadanos y las instituciones se vio completamente condicionada por los modos de represión que el gobierno de facto desempeñaba. Las diferentes formas de expresión fueron atacadas: las manifestaciones multitudinarias a favor del gobierno de Manuel Zelaya y la propagación de los acontecimientos a través de los medios de comunicación.

Hasta el día 28 de junio la información de actualidad del país centroamericano circulaba con total normalidad. Tanto los medios independientes como los de carácter público daban cuenta de la realidad con criterios diversos. Pero, una vez que las Fuerzas Armadas, junto con Roberto Micheletti, irrumpen en el sistema político nada continúa de la misma manera.
La experiencia que nos dejaron los gobiernos militares de las décadas del 70 y 80 en Latinoamérica es muy semejante a lo que ocurre en Honduras en el presente. Y esto, en cuanto a la utilización o a las medidas que toman las autoridades golpistas respecto de qué se dice y qué no públicamente.


Dentro de las primeras operaciones que llevó adelante el gobierno de facto están los allanamientos a las instalaciones de los medios de comunicación. En primer lugar se inspeccionaron los canales de televisión y emisoras radiales. Pero no sólo se los investigó, sino que, además, se les obligó a suspender sus transmisiones porque los militares ocuparon las instituciones periodísticas. A ello hay que agregar que las emisiones se vieron restringidas por cuestiones técnicas vinculadas a los cortes de luz y a las tomas de repetidoras y transmisores.
Varios canales fueron sacados del aire debido a que informaban sobre lo que estaba sucediendo en el país. Algunos programas de televisión, que tenían una apreciación crítica del golpe de Estado, fueron prohibidos. Tal es el caso de Radio Globo, Canal 36, Telesur, la CNN, entre otros.
A los periodistas y camarógrafos, que cubrían las manifestaciones y protestas de los ciudadanos hondureños que resisten y hacen frente al gobierno militar, se los detuvo, se los agredió y se los amenazó. Varios de ellos, luego, fueron puestos en libertad. Sin embargo, se registraron asesinatos de algunos trabajadores de los medios. Asimismo fueron destruidos los materiales fotográficos producidos al igual que las cámaras.
Claro que no el total de canales ni la totalidad de emisoras han sido suspendidos. La polarización que se percibe en los medios de comunicación tiene de un lado a aquellos que son de propiedad pública, es decir, que no tienen independencia del Poder Ejecutivo y, por ende, se los inscribe a favor del golpe. A ellos se los utilizó con el fin de concientizar acerca del aspecto positivo de la imposición de los militares en el gobierno de Honduras. Sin embargo, sus emisiones son condicionadas: la información que manejan está manipulada y censurada. Ciertos canales han cambiado su programación (privilegian las notas del espectáculo, las telenovelas y las tiras cómicas) para evadir lo que realmente pasa y han cambiado el personal que los dirige. Dichos medios no aluden, por ejemplo, a las restricciones a la prensa, al toque de queda ni a los constantes cortes de la energía eléctrica.
A las medidas extremas que las fuerzas de seguridad han ejecutado, los medios han respondido resistiendo. Las producciones y los archivos que documentan el verdadero presente del territorio hondureño encontraron caminos alternativos de expansión hacia la comunidad internacional: desde la clandestinidad se transmiten por internet múltiples formatos de realizaciones audiovisuales elaboradas por profesionales y ciudadanos comunes.

Se observa una contradicción en el gobierno de Micheletti: la toma del poder político en Honduras tiene como fin, según sus palabras, conservar el orden democrático. Pero, resulta que la democracia implica la garantía y protección del derecho a la libertad de expresión. Pues, manifestarse sin limitaciones es la condición fundamental para la defensa de todos los derechos humanos y para la existencia de cualquier sociedad civil. ¿Será que para él la democracia implica sólo algunos aspectos de la vida social? ¿O que nada tiene que ver ella con la diversidad de voces?

viernes, 11 de septiembre de 2009

Empresa Periodística gráfica local

Nombre de la publicación: Semanario PARALELO 32.
El curioso calificativo sitúa geográficamente a la ciudad de Crespo en el hemisferio.



Fecha de fundación: 1º de julio de 1972.
Domicilio de la redacción: Moreno 1256.
Ciudad: Crespo, Entre Ríos.
Teléfonos: (0343) 4954183 o 4951341
Dirección electrónica: redaccion@paralelo32.com.ar
Página web: www.paralelo32.com.ar
El semanario se edita en Internet desde el año 2000, con actualizaciones permanentes.
Grupo fundador: En el año 1972 Mario Rubo y Luís Egidio Jacobi, que hacían sus primeras armas en radio y como productores publicitarios, fundan Paralelo 32; al servicio de la población de Crespo y de localidades vecinas (como Diamante, Seguí, Villa Libertador San Martín, Racedo, Ramírez, entre otras); por aquel entonces de tirada quincenal.
Su objetivo, fue y sigue siendo “sostener con Dignidad nuestra Opinión”

El primer número decía:
“Tenemos fe en nuestras posibilidades y más fe aún en el principal aliado que pude llegar a tener Paralelo 32, (…) la gente de su pueblo que comprende la necesidad de un periódico independiente…”

La empresa periodística hoy:
Fecha de su fundación: 1º de julio de 1972.
Con treinta y siete años de vida, ha trascurrido diferentes etapas; tanto políticas, económicas y sociales, pero siempre sostuvo su compromiso de informar fielmente.

Razón social: Según información brindada por empleados del semanario, el director de éste, Luís Egidio Jacobi, se encuentra inscripto en la AFIP.
Domicilio legal: Moreno 1256 – C.P. (3116) – Crespo, Entre Ríos, Argentina.
Ciudad: Crespo, Entre Ríos.
Teléfonos: (0343) 4954183 o 4951341
Dirección electrónica: redaccion@paralelo32.com.ar
                                 paralelo32@infovia.com.ar
Página web: http://www.paralelo32.com.ar/

Tipo de sociedad: Empresa privada, que tiene como único dueño al entonces director Luís Egidio Jacobi.
Propietarios o principales integrantes de la empresa periodística: Luís Egidio Jacobi es el Director - Propietario. Miembro activo de la Asociación de Diarios Entrerrianos (ADDE) y la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA).

¿Esta Empresa Periodística pertenece a un Multimedio y/o Megaempresa? No.

Organigrama de la publicación:
Director: Luís Egidio Jacobi
La publicación cuenta con 5 redactores que no están destinados a secciones especígicas. Ellos son los encargados, al mismo tiempo, de conseguir las imágenes y fotografías que ilustran las notas.
Gráfica y diseño del semanario: 2 son los encargados de esta tarea.
Personal administrativo: 2 personas se dedican a recibir las solicitadas, cartas de lectores, avisos publicitarios, anuncios sociales y clasificados.  
Paralelo 32 cuenta con una oficina central en Crespo, donde se realizan todas las notas locales que conforman el periódico, y corresponsales que cubren las noticias de cada localidad que comprende el semanario.
En Victoria se imprimen las dos ediciones de Paralelo 32 y se ensambla en Crespo la edición correspondiente a esta ciudad y zonas aledañas. En la localidad crespense los sábado a primera hora está en la mayoría de las casas.

Identikit de la publicación:
A través de la visualización de cuatro portadas del semanario, de diferentes décadas, se aprecia una marcada evolución entre los años 80 y 90, como así también en el 2000.
Con los avances de la técnica fue incorporando nuevas tipografías, anexando color, y diagramando mejor las páginas, dando respiro a la vista con la adquisición de más blancos. Lo que se pretendía a través de la tipografía y la composición era organizar los significados.
Desde los 90 el nombre del periódico se identifica por una particular estilo de fuente. Amplió la cantidad de páginas (en formato tabloide) y su precio fue variando según las condiciones económicas del país. Actualmente brinda 68 páginas a 2,50 pesos.
De lenguaje claro, dirigido a toda la población, desarrolla las noticias más destacadas de la semana en la provincia, en la ciudad y en las localidades aledañas, con un formato de cinco columnas, ordenado y de prolijo diseño. Utiliza espacios estratégicos para las publicidades y adecuados recuadros que engloban en forma de guía a los profesionales o, en conjunto, a especializados con la leyenda “Aquí está la solución”.
Las imágenes que ilustran las notas tienen la finalidad de atestiguar los hechos, en ocasiones son acompañadas con un pie de página.
El semanario cuenta con dos ediciones, una publicada en la ciudad de Crespo y otra en la ciudad de Victoria. Tiene corresponsales y distribuidores en 35 localidades entrerrianas.
La primera sección está dedicada al tema de tapa, que mayoritariamente se refiere a una cuestión central que interesa a toda la provincia. En la edición del sábado 5 de septiembre de este año, por ejemplo, se puede apreciar en la portada el panorama político: la puja entre Urribarri y Busti, y el denominado “conflicto agrario”.
Una sección característica del periódico es “El Mangrullo” con subtítulos acompañados de emoticones, donde se desarrollan líneas que comentan la realidad con un toque sumamente particular.
Ubicados en las noticias de Crespo, se localizan varias páginas que vuelcan los hechos de la ciudad. En una página denominada “Breves”, como su nombre lo indica, proporciona en escasas palabras información de interés general.
El semanario conforma en un recuadro una agenda de los eventos que se realizaran durante la semana en la ciudad. Pensando en la mujer, “Nosotras” brinda datos sobre cuidado personal, salud, belleza, decoración, recetas, entre otras.
“Sociales” es el portarretrato de los cumpleañeros, felices profesionales, testigo de bautismos y casamientos, como también de salutaciones para ocasiones especiales como el día del maestro.
Es habitual encontrar “Adolescencia” dos páginas exclusivas para los adolescentes con canciones e informaciones sobre bandas.
Paralelo 32 consta de dos suplementos: Deportes y Campo Nuestro.
Al ser un semanario que tiene una amplia tirada en la zona, recorre sus páginas por la región, como Villa Fontana, Gobernador Etchevehere, Colonia Reffino, Racedo, Las Tunas, Viale, Segui, Don Cristóbal, Camps, Sosa, María Grande, El Pingo, Tamossi, Hasenkamp, Ramirez, Hernandez, Libertador San Martín, María Luisa, Aldea San Antonio, Costa Grande y Aranguren.
En las últimas páginas del total de 68, se ubican los Clasificados.
Paralelo 32 desde sus comienzos buscó la participación directa del lector. En la década del 80 a través de Luz y Tinieblas (título de la sección), brindaba un espacio para realizar comentarios, y reflexiones. También dio lugar a la publicación de cartas de lectores; y actualmente tienen un número telefónico (343 154568469) abierto para la recepción de sms, para hacer comentarios, que son publicados tanto en el semanario como en el portal digital.
La "transformación tecnológica que se acelera en la última década con el surgimiento de nuevos medios y tecnologías también profundiza esta tendencia hacia una cultura mediada por instrumentos y pantallas" . El periódico se ha adecuado a la actualidad con la incorporación en el 2000 de la página web www.papelelo32.com.ar, portal digital de noticias, actualizado diariamente; acercando las novedades de Crespo a nivel mundial.

Análisis de la programación de Canal 7 –La TV Pública– y Telesur –Nuestro norte es el Sur.


El siguiente trabajo tiene como fin establecer una comparación entre Canal 7-La TV Pública y la nueva señal latinoamericana Telesur. Como punto de análisis elegimos ver las similitudes y diferencias en lo que respecta a programación de dichos canales. Para ello observamos los medios mencionados y tomamos las grillas correspondientes a la semana completa. De allí obtuvimos varias conclusiones que expondremos enseguida.

En primer lugar, partiendo de uno de los objetivos de Telesur (desarrollar y poner en funcionamiento una estrategia comunicacional televisiva hemisférica de alcance mundial que impulse y consolide los procesos de cambio y la integración regional que sea herramienta contra las ideas del proceso hegemónico de globalización) percibimos que en su mayoría la programación hace realidad las metas que se planteó a través de la amplia cobertura de noticias. Y otra cuestión que puede notarse, claramente, es que no existen espacios publicitarios sino propagandas de bien público y promociones de los programas que saldrán próximamente al aire.
En lo que respecta a Canal 7, una señal del Estado (entendiendo esto como una adecuación de los contenidos a las políticas del gobierno que se encuentra en el poder), hemos observado que los programas de la grilla son muy cuidadosos a la hora de hacer críticas en contra del oficialismo. Y en cuanto al espacio destinado a las tandas, predominan las publicidades comerciales.
Haciendo una mirada a la planilla de emisiones y a los temas que en ella se abordan, nos percatamos de que en Telesur prevalece el género informativo y de opinión dejando un espacio similar al ámbito cultural, educativo y de entretenimiento. Mientras tanto, Canal 7 reduce el espacio de noticias para darle más lugar al entretenimiento, a la caracterización de las costumbres argentinas (por medio de programas folclóricos y de fiestas populares del país), a las producciones audiovisuales que se realizan a nivel nacional (principalmente unitarios) y a la mayoría de los actos del gobierno.
Si aludimos a la duración de cada presentación, en lo que respecta a Canal 7 podemos ver que cada segmento tiene una extensión temporal de 60 minutos o más. Por el contrario, Telesur presenta una estructura más dinámica al proponer cada 30 minutos una manera de programación diferente: en la presentación de las noticias centrales, por ejemplo, hay una pluralidad de voces en tanto que en las notas aparecen varias personas que se destacan en el sector gubernamental de nuestra región y de Hispanoamérica; el periodista que exhibe las notas es uno solo en general y los informes que se exponen a la audiencia se dan de forma fluida debido a que son de escasa duración (no superan los dos o tres minutos).
Otra cuestión en la que se distinguen ambos canales es la de que en la señal del 7, por un lado, sus espacios informativos compendian varios aspectos que interesan a la sociedad en un único noticiero. Lo que hace Telesur es dedicar programas exclusivos a cada faceta que involucra a los seres humanos (economía, política, deportes, historia, cultura, geografía, entre otros).
Pero no sólo en la comparación se ven diferencias, sino que hay algunas similitudes entre uno y otro canal. A través del análisis de ambas señales vemos que coinciden en la construcción de la identidad del público al que están destinadas. En el caso de Canal 7 se refuerza el ser nacional por medio de la apelación a la preparación del festejo del Bicentenario de nuestra patria, el cambio de imagen por el de la escarapela celeste y blanca, entre otras cosas. La programación de Telesur se propone dar cuenta de las características de los hombres y mujeres latinoamericanos, de sus ideas en la lucha por la independencia y en contra de la hegemonía norteamericana. Y esto, se manifiesta, en primera instancia, por ejemplo, en la frase que acompaña al logo del canal: “Nuestro norte es el SUR”. También, en la forma en que se narran las noticias ya que quienes tienen esta tarea hablan el acento español de su país de origen sin ningún fingimiento del español neutral como hacen otras cadenas de noticias continentales.
Otra circunstancia en la que concuerdan es la de tener como horarios centrales de emisión de los noticieros las 13 y las 21 horas. Allí se reúnen y se exponen las principales novedades del día. Es uno de los únicos programas (el de las 13) de Telesur que tiene una extensión de 60 minutos (el resto de las emisiones son de media hora).
Las conexiones de ambos canales en diferentes momentos del día dan cuenta de las semejanzas en cuanto a contenidos y temas de interés de la región. Por esa razón comparten, en ocasiones, los mismos informes. Así, se percibe que Telesur transmite hacia toda Latinoamérica Visión 7 Internacional (los sábados a las 13). Y Canal 7 difunde la señal del medio multiestatal después de la medianoche.

A modo de conclusión, podríamos decir que ambos canales (la TV Pública y Telesur) son muy semejantes en sus propósitos de construcción de un modo de presentación de las ideas latinoamericanas y nacionales al resto del mundo. Los dos medios reflejan las características de la población donde se producen las piezas y sus problemáticas, además de los contextos en que ellas se dan.
También se parecen en la importancia que le imprimen a lo informativo y a lo cultural. Si bien es cierto que no lo hacen en las mismas proporciones, en alguna medida se corresponden.
Las diferencias se establecen en la forma o manera en el que la programación es expuesta (la duración de las emisiones, la especificidad en el tratamiento de algunos aspectos –economía, deportes, etc.–, la reiteración en el día de varios de ellos, la fluidez de los informes, la pluralidad de voces – lo que le da a la información mayor rigurosidad– entre otras cuestiones).
A partir de lo observado y de haber entrado en contacto, por primera vez, con la señal de Telesur, consideramos que Canal 7 podría equilibrar su programación agregando algo más de carácter informativo. Del mismo modo, creemos que la manera fluida y dinámica de exponer las notas y la programación, en general, es un estilo apto para hacer que la información sea actualizada constantemente por parte de la audiencia. Pero, además, esto es importante porque la vida moderna de los trabajadores les da poco tiempo para dedicarse a estar al tanto de lo que pasa en el contexto social en el que viven.

Alumnas: Marina Basgall, Noelia Bruno, Belén Demartin