Guía de lectura Nº1

domingo, 30 de agosto de 2009

De la imprenta a nuestros días


“(…) el papel, el tipo móvil y la prensa impresa se convirtieron

en una forma de liberación y en el agente de cambios

a largo alcance de la vida social e intelectual”.

Raymond Williams



Primeramente los escritos sólo eran accesibles a unos grupos; esta fragmentación está reflejada en colecciones de biblioteca. Durante mucho tiempo, la escritura era meramente considerada como un medio de fijar la palabra hablada, especialmente en las universidades y cuyo principal propósito era preparar a sacerdotes y oradores. Sin embargo con la aparición de la imprenta; ocupó el centro de los movimientos intelectuales, literarios, económicos, tecnológicos y políticos.



A fines del siglo XII, el papel se había introducido en Europa por parte de los árabes, justo en el momento en que la cultura escrita estaba creciendo y se limitaba el abastecimiento disponible de pergamino. Luego, surgió la idea de utilizar el papel no sólo para documentos legales, informes y manuscritos sino también para reproducir imágenes con la técnica de relieve tallado en madera. De este modo se había logrado la reproducción de imágenes. Posteriormente también se logró la reproducción de texto, de la mano de los trabajadores del metal: orfebres y fabricantes de monedas; quienes formaban matrices de caracteres.

La imprenta se creó, no como resultado de una invención autónoma, sino cuando se reconoció la necesidad de ésta.

La técnica de imprimir con el tipo móvil, es el legado de Gutenberg, quien en 1457 publicó el primer libro impreso. Los primeros ejemplares fueron indulgencias, almanaques, y pequeñas gramáticas.

Desde el principio la imprenta estuvo destinada a jugar un papel importante en acelerar la comunicación a varios niveles culturales.

En sus inicios ha sido un medio de información de todo tipo, aparecían panfletos con descripciones de victorias militares, festivales y funerales. Con el paso del tiempo empezó a utilizarse para decretos oficiales, proclamaciones y avisos. Posteriormente se dio lugar a las narraciones populares de apariciones monstruosas y otros sucesos ficticios. Y más tarde la imprenta empezó a utilizarse cada vez más para todo tipo de publicidad.

Algunos de los productos de la prensa tendían naturalmente a ser publicaciones periódicas, como almanaques y calendarios, que con el tiempo fueron añadiendo noticias, desde sucesos políticos hasta predicciones astrológicas.

La demanda de noticias financieras y políticas de actualidad, de parte de un público sustancial, llevó al surgimiento de los auténticos periódicos.

A principios del siglo XVII Holanda y Alemania fueron los países que inauguraron el servicio regular de noticias donde se editaban varios panfletos de noticias quincenales y semanales. Sin embargo Londres produjo el primer periódico diario del mundo, el Daily Courant (1702); las tiradas de prensa se multiplicaron, a pesar del timbre fiscal entre 1712 y 1757.

En Francia la revolución liberó a la prensa de los grilletes del sistema de privilegios. El artículo XIX de los Derechos del Hombre declaraba que “la comunicación libre del pensamiento y la opinión es uno de los más preciados derechos del hombre. Por lo tanto, cada ciudadano puede hablar, escribir o imprimir libremente excepto en los casos que la ley lo impida”. Dando lugar a la proliferación de panfletos políticos.


El crecimiento del periódico, coincidió con la inauguración de la Revolución Industrial que dio lugar a la aparición del tren, el barco a vapor, la hélice, el casco de metal, el telégrafo óptico y luego eléctrico, posibilitando que el periódico funcionara por un lado, para guiar las aspiraciones de la burguesía ascendente, y por otro, para ser la voz organizadora del proletariado urbano desarraigado y pobre.

Se produjo una verdadera revolución en las comunicaciones, el periódico surgió como una fuente indispensable de noticias rápidas y regulares.

Los diarios que antes se vendía por suscripción, a partir de fines del siglo XIX se vendían a todo el mundo.



En el siglo XVII aparece el “cilindro holandés” para la fabricación de papel.

Posteriormente, en 1750 James Whatman fabrica el papel vitela de alta calidad y de suave textura para la elaboración de libros. El vapor al reemplazar a la energía hidráulica provoco la suba en la producción, que la industria fue capaz de abastecer los enormes pedidos de las imprentas.

Hacia mediados del siglo XIX en Alemania se logró un proceso de producción de pasta de papel mecánica triturando la madera blanca y suave de la pícea. Le siguió la pasta química en la segunda mitad de siglo, con lo que se dejaba ya preparado el camino para las gigantescas fábricas papeleras.

Se dieron nuevas mejoras en las técnicas de impresión. En 1800 Robert Walter inventó una prensa de hierro que reemplazó la de madera. Entre 1777 y 1803 el alemán Konig trabajó en la idea de una prensa mecánica a vapor, y se le ocurrió reemplazar la platina lisa por un cilindro de los usados para el grabado en cobre, utilizando el rodillo de tinta inventado por el londinense Nicholson, para reemplazar los viejos tinteros manuales.

El 29 de noviembre de 1814 The Times se imprimió por primera vez con la prensa a vapor de Konig y al año siguiente encontró un modo de acoplar dos prensas de modo que el frente y el dorso de cada página se podía imprimir de una sola vez. Prensa denominada “perfeccionada” o “de retroceso”.

En 1829 Genoux sugirió sustituir el yeso por un estereotipo más flexible como el papel “mache” para proporcionar una mejor fabricación de los periódicos. La tecnología se perfeccionó y se empezó a utilizar entre 1857 y 1860. Esto hizo posible imprimir periódicos en rollos de papel continuo y, de este modo, las máquinas papeleras gigantes fueron unidas a inmensas prensas rotativas capaces de imprimir, doblar y guillotinar decenas de miles de periódicos enteros cada hora.

En 1845 Gérard de Nerval fabrica una máquina de fundición de tipos que podía componer sus propias matrices hasta una medida de texto específica. Entre 1880 y 1890 Mergenthaler inventó la linotipia que justificaba automáticamente las líneas en una pieza. Y a principios del sigo XX apareció la máquina monotipo, que producía líneas justificadas formadas por caracteres individuales bajo las instrucciones de una cinta perforada previamente preparada.

Todo esto no habría sido posible sin la Revolución Industrial.



El avance de la tecnología hizo posible lo que fue llamado periodismo de masas. Tanto en Europa como en los Estados Unidos se produjo un explosivo crecimiento en la prensa. Surgió un estilo de periodismo popular agresivo con llamativos titulares y abundantes ilustraciones, con mucho uso de las tiras cómicas como el famoso “yellow kid” en Norteamérica.

Las nuevas técnicas de telecomunicaciones hicieron posible que cadenas de periódicos locales fueran coordinadas centralmente incluso hasta el punto de lograr una entrada aislada de composición o la transmisión de páginas completas para secciones comunes de noticias nacionales o financieras.

El periodismo popular, fue la respuesta a la mayor demanda de información y entretenimiento.



Mientras que el periódico estaba en su apogeo en los primeros treinta años del siglo XIX, el semanario y la revista ilustrada estaban en un proceso de desarrollo.

El desarrollo de las revistas se debió a dos nuevos procedimientos para la reproducción del texto y de ilustraciones, la litografía en offset y el fotograbado. Técnicas creadas para reunir los requisitos de las revistas impresas en papel glaseado y del enorme aumento en la cantidad de material publicitario, folletos y anuncios.



La imprenta en la era tecnológica, el rol de la imprenta en estos tiempos; si bien los hábitos de la escritura están cambiando de un modo significativo por los nuevos medios con los que contamos, el medio escrito es lo que perdura en el tiempo y es el material indiscutible de consulta. Un claro ejemplo son las publicidades (en general de productos y servicios) que abarcan todos los medios, incluyendo en estos el impreso a través de diarios, revistas, folletos, entre otros formatos, por la gran posibilidad que brindad de fijar la palabra hablada.

Guía de lectura Nº 1

• Primeras reproducciones de textos continuos (Lejano Oriente-China)

• 105 d.C. Invención del papel.

• Siglo VII Tallados de relieves en madera que después eran entintados como medio de reproducción de dibujos y textos sagrados sobre papel.

• Bloques de piedra grabados.

• Siglo X Hacer caracteres individuales de barro y colocarlos uno al lado del otro sobre un émbolo de madera para formar un texto.

• Siglo XII Se introdujo el papel en Europa por parte de los árabes a través de España e Italia.

• Siglo XIII Los turcos hicieron lo mismo: caracteres de barro colocados sobre un émbolo de madera.

• Siglo XIV Aparecen los primeros grabados en madera (imágenes acompañadas de textos)

• Reproducción de textos: los trabajadores del metal seguían un proceso para obtener los caracteres que componían la matriz.

• Principio del siglo XV Corea usó caracteres de cobre.

• En Europa se elaboraron textos manuscritos por los Hermanos de la Vida Común y su distribución estaba restringida al sector religioso.

• Impresión con el tipo móvil: esta técnica está ligada a la personalidad de Gutenberg (producción estandarizada de textos)

• 1457 Se publicó el primer libro impreso que llevaba un pie de imprenta: “Salterio de Mainz”

• 1470 Ya había 12 lugares con establecimientos con imprenta.

• Aparecieron panfletos con descripciones de victorias militares, festivales, progresos reales y funerales. La imprenta empezó a utilizarse para decretos oficiales, proclamaciones y avisos. Las narraciones populares de apariciones monstruosas y otros sucesos apócrifos. La controversia política y religiosa dio paso a una producción especialmente nutrida que iba de propaganda ordinaria a tratados refinados.

• 1500 Más de 200 establecimientos para impresión.

• Los años que siguieron se dedicaron a mejorar la técnica de impresión.

• Papel sujeto entre 2 armazones llamados el “frisket” y el “tímpano” para mantenerlo limpio.

• Finales del siglo XVIII esta tecnología básica empezó a ser realmente mejorada.

• Libro: impulsó la cultura y produjo cambios en la vida social.

• Emergió de forma gradual un comercio de libros organizado.

• Siglo XVIII Inglaterra: Pequeños impresores producían billetes, carteles, direcciones electorales y respuestas de candidatos a sus oponentes (inicio de la opinión pública)

• Algunos de los productos de la prensa tendían naturalmente a ser publicaciones periódicas, como almanaques y calendarios. Estas publicaciones fueron añadiendo noticias, desde sucesos políticos hasta predicciones astrológicas, mientras que los anuarios especializados también proliferaron.

• La demanda de noticias financieras y políticas de la actualidad, de parte de un público sustancial, llevó al surgimiento de los auténticos periódicos.

• La actitud de los gobiernos fue crucial en determinar el carácter de la prensa periódica que emergía en los distintos países (censura y libertad de prensa).

• 1702 Londres produjo el primer periódico diario del mundo.

• En Francia la revolución liberó a la prensa de los grilletes del sistema de privilegios.

2- Europa sufrió profundos cambios generales: el crecimiento del periódico (primero en Bran Bretaña) coincidió con la inauguración de la Revolución Industrial, que fue esencialmente una revolución en las comunicaciones. El periódico surgió como una fuente indispensable de noticias rápidas e irregulares en el momento en que el tren, el barco a vapor, la hélice, el casco de metal, el telégrafo óptico y después eléctrico estaban haciendo su aparición en un proceso que, virtualmente, significó la aceleración de la historia. El periódico sirvió, por un lado para fomentar las aspiraciones de la burguesía ascendente, y por otro jugó un papel de vital importancia como voz organizadora del humilde y desarraigado proletariado urbano, de modo que muchas de sus esperanzas residían en la dirección que iba a tomar el desarrollo de la educación, el progreso científico y, por lo menos en Francia, las votaciones. De aquí proviene el miedo a la prensa de parte de las autoridades y la larga lucha por la libertad de prensa.

3- La innovación en la fabricación de papel se había iniciado muy pronto. Ya en el siglo XVII la aparición del cilindro holandés acabó con lo que era prácticamente el monopolio francés en la fabricación del papel. Hacia 1750 un fabricante de papel inglés empezó a abastecer a un impresor de Birmingham de papel vitela de alta calidad y de suave textura, apropiado para la producción de libros. Los primeros intentos con éxito en el rollo de papel continuo fueron realizados por el empleado de una fábrica de papel de Essones, en Francia, antes de fin de siglo. Poco tiempo después el propietario de Essones llevó este proceso a Inglaterra donde lo perfeccionó, junto con otros fabricantes de papel.

La industria fue capaz de abastecer los enormes pedidos de las imprentas cuando el valor fue reemplazó a la energía hidráulica. A mediados del siglo XIX, había más de 300 máquinas de fabricación de papel a vapor.

Esta producción sumamente acelerada requirió nuevas fuentes de materias primas para reemplazar los jirones que siempre habían sido difíciles de conseguir. En 1718 se demostró que la fibra de celulosa se podía obtener de enjambres de avispas, pero se necesitaba más investigación sobre el tema y, de hecho, no fue hasta mediados del siglo XIX en Alemania que se consiguió un proceso de producción de pasta de papel mecánica triturando la madera blanca y suave de la pícea. Le siguió la pasta química en la segunda mitad de siglo, con lo que se dejaba ya preparado el camino para las gigantescas fábricas papeleras que consumen inmensos bosques de madera cada año.

Mientras, se dieron nuevas mejoras en las técnicas de impresión. Un problema era encontrar un medio de duplicar las formas para permitir hacer reimpresiones sin conservar el carácter permanente. La necesidad del gobierno francés de imprimir el papel moneda conocido con el nombre de assignats entre 1789 y 1797, y producir estereotipos de yeso de moldes de París se convirtió en una práctica común.

Fue aún de mayor importancia la necesidad de incrementar la producción de las prensas. Hacia 1800 se inventó una prensa de hierro que reemplazaría la de madera utilizada hasta entonces. Pero se necesitaban desesperadamente otras soluciones para substituir la demanda de periódicos. Un alemán trabajó en la idea de una prensa mecánica a vapor entre 1777 y 1803. Se le ocurrió reemplazar la platina lisa por un cilindro de los usados para el grabado en cobre o como el utilizado para hacer impresiones en relieve para profesores ciegos; también adoptó el rodillo de tinta para reemplazar los viejos tinteros manuales. En 1815 se encontró un modo de acoplar dos prensas de modo que el recto y el verso de cada página se podía imprimir de una vez. Había llegado la prensa “perfeccionada” o “de retroceso”.

El movimiento alternativo del tipo-platina limitó la producción a unos pocos miles de hojas por hora. Un ritmo de producción más rápido sólo se podía lograr con la adopción de una superficie de impresión cilíndrica según el modelo de los cilindros grabados utilizados para imprimir algodón en el siglo XVIII. El tipo quedaba encerrado en ramas y las columnas y páginas divididas en filetes fijados al cilindro de impresión. Esto les permitía construir máquinas monstruosas con cilindros verticales de gran diámetro, con un número de hombres que introducían las hojas de papel individualmente a la velocidad de 12.000 por hora. La llegada de un estereotipo flexible proporcionó una solución mejor. La tecnología se perfeccionó y se empezó a utilizar entre 1857 y 1860. Esto hizo posible imprimir periódicos en rollos de papel continuo y, de este modo, las máquinas papeleras gigantes fueron acopladas a inmensas prensas rotativas capaces de imprimir, doblar y guillotinar decenas de miles de periódicos enteros cada hora. Imprimir periódicos a un ritmo tan acelerado no habría sido de ninguna utilidad si la composición hubiera quedado sujeta a los viejos y lentos métodos manuales. Las máquinas eran luego activadas, lo que permitía que las letras fueran “llamadas” por medio de un teclado. Aunque fue de alguna utilidad por carecer de una alternativa mejor después de 1840, no resolvía la justificación de línea ni la compaginación y las revistas de esas máquinas “pianotipo”, como se las llamaba, sólo podían contener un número relativamente pequeño de caracteres. En 1845 dieron con la solución verdadera cuando se dispuso a fabricar una máquina de fundición de tipos que podía componer desde sus propias matrices hasta una medida de texto especificada. Sin embargo, hasta la década de 1880-1890 no se perfeccionó la primera linotipia, que justificaba automáticamente las líneas en una pieza. A principios del siglo XX apareció la máquina monotipo, que producía líneas justificadas por caracteres individuales bajo las instrucciones de una cinta perforada previamente preparada.



4- En Europa, poco a poco se ensambló la tecnología necesaria para hacer posible lo que fue llamado periodismo de masa. La prensa de un penique dio paso a la prensa de medio penique. Hacia 1914 la circulación de varios diarios británicos se acercaba a la cifra de un millón. En Francia, donde una ley de 1881 aseguró finalmente la libertad de prensa, las tiradas continuaron subiendo y en vísperas de la Primera Guerra Mundial había cuatro periódicos matutinos con más de un millón de lectores cada uno.

En Estados Unidos surgió un estilo de periodismo popular agresivo con llamativos titulares y profusión de ilustraciones, haciendo mucho uso de las tiras cómicas dirigidas con mucha habilidad a la muy básica cultura de los millones de nuevos inmigrantes.

Hacia 1910 había 22 periódicos diarios en Nueva York y en los Estados Unidos en conjunto unos 2430 periódicos imprimían 24 millones de copias cada día. La geografía evitó la aparición de diarios nacionales según el modelo británico y las circulaciones individuales nunca fueron superiores a un millón de copias. En cambio, los Estados Unidos presenciaron, hacia fin de siglo, la formación de cadenas de periódicos y el crecimiento de la columna de periódicos reconocidos nacionalmente por todo el país. Finalmente, las nuevas técnicas de telecomunicaciones hicieron posible que cadenas de periódicos locales fueran coordinadas centralmente incluso hasta el punto de lograr una entrada aislada de composición o la transmisión de páginas completas para secciones comunes de, por ejemplo, noticias nacionales o financieras, o cuestiones sindicales.

5- Mientras que el periódico estaba en su apogeo los primeros treinta años de este siglo, el semanario y la revista ilustrada estaban en un proceso de desarrollo. Este hecho coincidió con el desarrollo de dos nuevos procedimientos para la reproducción del texto y de ilustraciones (la litografía en offset y el fotograbado) hasta el punto de que pusieron seriamente a prueba los métodos tradicionales de la prensa tipográfica. Creadas para reunir los requisitos de las revistas impresas en papel glaseado y del enorme aumento en la cantidad de material publicitario, folletos y anuncios, conservaban religiosamente la imagen en el centro de la impresión. El tratamiento de la tipografía y la composición y corrección de la prueba por métodos tradicionales de metal caliente, como material para la cámara así como para las ilustraciones, hicieron mucho más posible un mayor grado de flexibilidad en el trazado y presentación de la página que con los métodos tipográficos que utilizaban el tipo por un lado y los bloques por otra.

Desde la década de los 50, la tecnología electrónica ha empezado a hacer estos procesos obsoletos o ha impuesto cambios radicales sobre ellos. La composición resultó la primera área afectada. El ordenador puede controlar una máquina de composición mecánica, pero es particularmente adecuado para el uso de técnicas de fotomontaje modernas, de las cuales la primera fue el proceso lumitype (lumitipia). Las últimas composiciones en películas generan sus propias formas de letra desde una matriz de impulsos luminosos y son capaces de componer todo un libro en pocos minutos. A su vez esta tecnología se aviene particularmente bien con los procesos de impresión en offset, ya que la imagen sobre una platina litográfica se produce por medios fotográficos. Así, parece que la constelación actual de procesos gráficos favorece las técnicas planográficas y relega el tipo a la basura.



6- En el apartado La imprenta en la era tecnológica se menciona que “Los historiadores saben que los nuevos sistemas y estructuras nunca borran por completo los anteriores sino que se superponen. Así las nuevas técnicas de almacenamiento y recuperación de información han necesitado de los medios de impresión en este campo para reagrupar y encontrar nuevas colocaciones, a menudo de carácter más especializado”.

Esto se vincula con el continuo desarrollo o perfeccionamiento que se percibe tanto en los mecanismos de impresión como en los diversos dispositivos (pen drives, tarjetas de memoria, reproductores de mp3 —y otros: mp4, mp5, mp6…—, cd’s, dvd’s, etc.) donde se guardan datos.

En este sentido, podemos ver que la aparición de las computadoras y los cambios que se efectúan para mejorar a éstas han modificado los hábitos de escritura de los redactores antiguos.

Actualmente, quienes escriben disponen de estas máquinas personales (en algunos casos portátiles) que reducen esfuerzo y tiempo. En pocas horas y de manera sencilla pueden imprimirse miles y miles de copias de un texto.

Del mismo modo la utilización de Internet ha posibilitado la difusión de textos a lo largo del mundo sin que sea necesaria la impresión de éstos. Y, desde esta perspectiva, puede decirse que estamos transitando una era en la que la tecnología digital y audiovisual está al alcance de todos. Esto origina, muchas veces, que accedamos a información sin la exigencia de tener el papel en nuestras manos.

En cuanto a los periódicos, los avances en los mecanismos de impresión han hecho que éstos multipliquen su tirada y mejoren su calidad en cuanto al papel, los colores, el formato, las ilustraciones, las secciones, entre otros. Además, ellos en su evolución han buscado públicos diferentes respondiendo a las demandas de sus lectores.